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Cómo hacer alcohol de quemar en gel

¿Cómo hacer alcohol de quemar en gel?

Saber cómo hacer alcohol de quemar en gel puede serte muy útil para llevarlo cómodamente de excursión si vas a hacer una barbacoa, o bien para limpiar superficies. Aunque se puede comprar en este formato, es difícil de encontrar en las tiendas. Por ello, aquí te enseñaremos cómo elaborar tu propio alcohol etílico en forma de gel.

Antes de leer cómo realizar tu gel de alcohol de quemar

Antes de ponerte manos a la obra, debes conocer ciertos aspectos por tu propia seguridad.

El gel de alcohol de quemar no es para desinfectarse las manos

El gel desinfectante para las manos, que fácilmente puedes encontrar en farmacias y supermercados, NO es como el gel de alcohol de quemar.

El alcohol de quemar es metanol, también llamado alcohol metílico, y es altamente inflamable y tóxico. Se emplea como combustible, disolvente y anticongelante. Es un excelente limpiador, pero no desinfectante.

El alcohol común puede ser etanol (presente en las bebidas, geles hidroalcohólicos, cosméticos) o alcohol isopropílico (desinfectante y cosméticos, incluyendo los geles de manos). Estos alcoholes sí son buenos desinfectantes y, aunque son inflamables, no son tan peligrosos como el alcohol metílico.

Así que tenlo presente: el gel que te proponemos solo servirá para prender fuego o como limpiador, no para sustituir el gel de manos.

Ten cuidado al manipularlo y almacenarlo

Como verás en la etiqueta del metanol, no debes almacenarlo cerca de fuentes de calor o donde puedan producirse chispas. También se recomienda manipularlo con guantes, mascarilla y gafas protectoras.

El vapor que emite el alcohol de quemar es tóxico e inflamable

Tanto el metanol líquido como en forma de gel produce vapores que son igual de peligrosos, así que cierra siempre bien el envase después de utilizarlo, procura no respirar los vapores y no fumes cuando lo fabriques o utilices.

Emplea el mismo envase del alcohol de quemar

No cualquier envase es válido, porque el alcohol metílico es corrosivo para muchos materiales. Por eso, lo más conveniente es que utilices el mismo envase en el que lo compraste. Como la mezcla te va a ocupar más espacio, guarda un envase que anteriormente haya contenido este alcohol o espera a consumir una parte del que hayas comprado.

Pese a que el vidrio es resistente al metanol, no recomendamos guardarlo en envases de vidrio porque podría romperse.

Cómo producir alcohol de quemar en gel

Te avisamos, conseguir los ingredientes puede costar lo suyo. Por eso te daremos varias alternativas.

Método 1

Qué necesitas

– 8’3 litros de metanol al 90-99 %

– 417 ml de agua

– 148 ml de glicerol al 98 %

– Mezcladores de madera, acero inoxidable o aluminio

– Probetas y jarras medidoras

– Embudo de plástico PET, aluminio o acero inoxidable

– Envase adecuado (mirar en el apartado anterior)

No te preocupes, no necesitas una probeta de precisión para medir las cantidades, pero sería conveniente que te acercaras lo máximo posible.

Procedimiento:

1. Mezcla cuidadosamente el agua y el metanol en el envase donde vayas a guardarlo.

2. Añade el glicerol con una probeta. Es muy viscoso y se adherirá a las paredes del envase y a tus manos, pero no te preocupes, se seca o se va fácilmente con agua.

3. Cierra rápidamente el envase.

3. Tapa bien el frasco y remueve con uno de los agitadores que te hemos recomendado. Si no tienes, agita suavemente hacia los lados y no de arriba a abajo, para evitar que el líquido salga fuera en caso de accidente.

Método 2

Si buscas cómo crear menos cantidad de gel, decídete por este método:

Qué necesitas

– 90 ml de alcohol de quemar

– 3/4 de cucharadita de carbopool (suelen tenerlo en las farmacias)

– 1/4 de cucharada de glicerina pura

– 1/4 de cucharadita de trietanolamina (suelen tenerlo en las farmacias)

– Tazón de vidrio de 1 litro

– Colador de malla fina

– Agitador de globo

– Envase de plástico adecuado para alcohol etílico

Preparación:

1. Coloca el colador sobre un bol de tamaño adecuado, y vierte el carbopol.

2. Deshaz los grumos con ayuda de una cucharita hasta conseguir que sea un polvo fino.

3. Pon el alcohol de quemar en el recipiente de vidrio.

4. Agita vigorosamente con ayuda del agitador mientras vas añadiendo el carbopol poco a poco.

5. Añade la glicerina mientras lo mezclas suavemente con el agitador.

6. Cuando no queden grumos de carbopol y se haya disuelto totalmente, añade la trietanolamina gota a gota, procurando no poner demasiada, mientras sigues mezclando con cuidado. Verás que se forma el gel.

7. Vierte el alcohol en gel en la botella de plástico y tapa firmemente.

8. Si te parece que el gel ha salido demasiado espeso, añade un poco de alcohol hasta que consigas la textura adecuada.

Ahora que ya sabes cómo hacer alcohol de quemar en gel, no olvides guardarlo adecuadamente y podrás llevarlo y utilizarlo cómodamente donde quieras.

Cuantos grados tiene el alcohol de quemar

¿Cuantos grados tiene el alcohol de quemar?

Hoy vamos a ver cuántos grados tiene el alcohol de quemar

En el caso del metanol o alcohol de quemar no se habla de grados tan a menudo como con el etanol.

A veces se compra prácticamente puro, para diluirlo en agua uno mismo, según el uso que se le dé. Hay que destacar que el alcohol de quemar continúa siendo tóxico y peligroso para la piel y las mucosas aunque se encuentre diluido.

Ahora bien, ¿cuántos grados tiene el alcohol de quemar? ¿Y el de limpieza?

La forma más habitual de adquirirlo comercialmente es en concentraciones de 70 a 75º (más apropiado como limpiador) o de 95 a 98º, más apropiado como combustible, es decir, para encender barbacoas y similares. Por supuesto, también podemos comprar el de alta graduación y disolverlo añadiendo la cantidad de agua necesaria para convertirlo en limpiador.

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¿Qué significan los grados de alcohol?

Igual que con las disoluciones de etanol, los grados (º) de alcohol equivalen a su porcentaje en volumen (%). Es decir, un alcohol de 75º, está formado por un 75 % de alcohol, que son 75 ml por cada 100 ml de disolución total o 3 partes de alcohol y 1 de agua.

es lo mismo etanol que alcohol de quemar

¿Es lo mismo etanol que alcohol de quemar?

Hoy vemos si es lo mismo etanol que alcohol de quemar

Por ir directos al grano: No, son totalmente diferentes.

Aunque ambos pueden servirte para limpiar, tienen diferente efecto, ya que el etanol (alcohol sanitario) desinfecta mucho más que el alcohol de quemar.

Además, el etanol se puede utilizar en la piel, mientras que el alcohol de quemar es muy perjudicial para la misma. Por otra parte, aunque el metanol (alcohol de quemar) se utilice en el procesado de ciertos alimentos, no es ingerible ni aunque se diluya. Así que no es lo mismo el etanol que el alcohol de quemar.

También has de tener en cuenta que el alcohol de quemar comercial, por ejemplo para encender las barbacoas o para limpiar, a menudo está mezclado con otros ingredientes como gasolina o acetona, que no deberían entrar en contacto con la piel.

Además, el alcohol de quemar se evapora más rápidamente que el etanol, de ahí el peligro de inhalarlo y la recomendación de utilizarlo llevando mascarilla.

¿Como preparar alcohol de quemar?

¿Como preparar alcohol de quemar?

¿Como preparar alcohol de quemar?

Vamos a partir de un alcohol de quemar concentrado, es decir, de un 99 % de concentración. Dependiendo de para qué lo utilices, deberás mezclarlo con agua o podrás aumentar su efectividad con otras sustancias. Lee atentamente nuestros consejos sobre como preparar el alcohol de quemar con seguridad.

➝ Como líquido de encendido: cuando en la etiqueta ya dice «alcohol de quemar» y se indica que es apto para barbacoas, chimeneas, etc. úsalo puro y siempre con las recomendaciones que hemos indicado en el apartado de «Cómo usar el alcohol de quemar».

➝ Para limpiar cristales y vidrio: mezcla una parte de alcohol y tres partes de agua. Utiliza con un pulverizador y seca bien con papel absorbente.

➝ Para limpiar azulejos, encimeras y similares: mezcla alcohol de quemar y agua a partes iguales. Puedes usar un pulverizador, esponja o bayeta.

➝ Como desengrasante: vierte un buen chorro de alcohol de quemar en un recipiente de agua caliente.

➝ Para limpiar la vitrocerámica: mezcla una parte de alcohol de quemar con tres de agua. Usa con una bayeta suave.

➝ Para limpiar acero inoxidable: mezcla una parte de alcohol de quemar y tres de agua. Usa una bayeta suave para no rayar el metal.

➝ Para limpiar espejos: puedes utilizarlo como para los cristales. Pero será más efectivo si haces una pasta con media taza de alcohol de quemar y una de tiza pulverizada. Aplica sobre el espejo, deja actuar media hora, retira con un trapo húmedo y unas gotas de lavavajillas. Sécalo bien.

➝ Para quitar manchas de tinta de superficies: aplica alcohol de quemar en la mancha, deja actuar un poco y retira con un paño o papel absorbente.

➝ Para limpiar suelos: pon alcohol de quemar y agua a partes iguales en un cubo y friega el suelo como suelas hacerlo. Ventila bien la casa.

➝ Para limpiar el parqué: mezcla alcohol de quemar, agua y zumo de limón a partes iguales, aplica con un paño suave, deja actuar unos minutos y limpia con una mopa.

➝ Para limpiar interruptores: después de desconectar la electricidad por seguridad, pasa un paño con agua jabonosa, sécalo, luego pasa un paño con alcohol de quemar y seca con un trapo.

Aluminio (marcos de puertas, ventanas…): mezcla alcohol de quemar y vinagre a partes iguales, aplica y seca con papel absorbente.

➝ Eliminar la cal de las mamparas de ducha de plástico: mezclar amoniaco, alcohol de quemar y agua a partes iguales y aplica con un pulverizador. Deja secar unos minutos y secar con papel absorbente.

Para limpiar mármol: mezcla alcohol de quemar, medio limón y un poco de agua tibia. Frota la superficie con papel absorbente.

➝ Para quitar manchas de los muebles: pon un poco de alcohol sobre la zona afectada, deja actuar unos minutos y retira con una gamuza suave.

➝ Para sacar brillo a los muebles: mezcla a partes iguales alcohol de quemar, agua y aceite de linaza. Aplica con una esponja, deja secar y retira con una gamuza suave.

➝ Quitar pegamento de superficies lisas: pasa un algodón empapado en alcohol de quemar por encima de la mancha y frota con energía hasta que lo puedas quitar.

➝ Quitar pegamento de tela de algodón: pon papel absorbente en la parte trasera de la mancha, y pasa un algodón empapado en alcohol de quemar por la mancha. Frota hasta poder quitarla y, después, aclara con agua.

Donde tirar el alcohol de quemar

¿Donde tirar el alcohol de quemar?

Donde tirar el alcohol de quemar

Según reglamentos de la UE y de la CE, se recomienda evitar el vertido a desagües, aguas superficiales o subterráneas o al suelo, sobre todo si es en grandes cantidades. Así que, si no quieres utilizar el alcohol de quemar, recomendamos que pienses en otro uso para él o se lo des a otra persona que quizá pueda utilizarlo (para encender la barbacoa, etc.).

Si no tienes más remedio que tirarlo, acude a un punto autorizado para la recogida de residuos. Allí te dirán dónde tirar el alcohol de quemar.

En cuanto al envase vacío, suele ser de plástico, de modo que puedes depositalo en el contenedor amarillo.

Esperamos que con esto hayas comprendido qué es el alcohol de quemar. Es importante que lo tengas en cuenta para tu seguridad y para aprovechar al máximo las muchas ventajas que ofrece.

Es lo mismo etanol que alcohol de quemar

¿Es lo mismo etanol que alcohol de quemar?

¿Es lo mismo etanol que alcohol de quemar?

No, son totalmente diferentes. Aunque ambos pueden servirte para limpiar, tienen diferente efecto, ya que el etanol (alcohol sanitario) desinfecta mucho más que el alcohol de quemar.

Además, el etanol se puede utilizar en la piel, mientras que el alcohol de quemar es muy perjudicial para la misma. Por otra parte, aunque el metanol (alcohol de quemar) se utilice en el procesado de ciertos alimentos, no es ingerible ni aunque se diluya. Así que no es lo mismo el etanol que el alcohol de quemar.

También has de tener en cuenta que el alcohol de quemar comercial, por ejemplo para encender las barbacoas o para limpiar, a menudo está mezclado con otros ingredientes como gasolina o acetona, que no deberían entrar en contacto con la piel.

Además, el alcohol de quemar se evapora más rápidamente que el etanol, de ahí el peligro de inhalarlo y la recomendación de utilizarlo llevando mascarilla.

como diluir el alcohol de quemar

¿Cómo diluir el alcohol de quemar?

El alcohol de quemar se llama en realidad metanol o alcohol metílico. No tiene nada que ver con el alcohol desinfectante o el que tienen las bebidas (etanol), pero sí coinciden en que, a diferentes concentraciones, tienen diferentes usos. Así que, aunque adquieras metanol prácticamente puro, a continuación te explicaremos cómo diluir alcohol de quemar según el uso que quieras darle.

Puedes comprar el alcohol de quemar puro o diluido

No muy diluido, pero puedes. En el mercado existen, fundamentalmente, dos tipos de metanol:

Alcohol de quemar o metanol, o alcohol metílico a secas: de 95 % a 99,9 % de concentración. Es el que se utiliza como combustible, es decir, para encender el fuego de las barbacoas o chimeneas.

Alcohol de limpiar o metanol, o alcohol metílico diluido: suele estar concentrado en un 70-75 %. Se vende con la indicación «para limpiar» porque esta es una buena concentración para ello, pero, como verás, es mejor utilizarlo aún más diluido para ciertas superficies.

El metanol puro de concentración 100 % no se comercializa porque esta sustancia es tan volátil que se evaporaría enseguida y generaría vapores muy inflamables y muy peligrosos para nuestra salud al ser inhalados.

Aprende a leer la etiqueta

Es muy importante que, antes de hacer cualquier disolución o mezcla, leas bien la etiqueta del alcohol de quemar que has comprado. No solamente por las advertencias de seguridad, sino también para ver la concentración que tiene. En vez de la nomenclatura de porcentaje que hemos utilizado nosotros, puedes encontrarla en grados. Igual que sucede con el alcohol etílico, ambas son equivalentes.

Algunas precauciones si vas a diluir el alcohol de quemar

No has de guardar el alcohol de quemar en un recipiente distinto del que adquiriste. Así que, si vas a diluirlo o mezclarlo, puedes hacerlo en otro recipiente (como un cubo), pero no guardes el restante: tíralo en el inodoro o similar. No te preocupes, aunque es cierto que el alcohol metílico contamina (como otros productos de limpieza), las cantidades en el hogar son muy pequeñas, sobre todo si está diluido.

Además, ponte guantes, mascarilla y gafas protectoras cuando mezcles el agua con alcohol, igual que cuando limpies con él. Aunque no lo toques, el alcohol de quemar emite vapores que pueden dañar tus ojos y tu piel.

¿Cómo obtener metanol 70 % a partir de alcohol de quemar de 95 o 99 %?

¿Has comprado alcohol destinado a encender la barbacoa y te gustaría utilizarlo para limpiar? De nuevo, primero revisa la etiqueta. Asegúrate de que no tiene otros aditivos específicos para encender fuego, como puede ser la gasolina, porque entonces no sería adecuado para la limpieza.

Los ingredientes deberían estar escritos en la etiqueta. Pero si no lo están, busca el producto en Internet o ponte en contacto con el fabricante. No hagas ninguna mezcla sin asegurarte de que el producto solo contiene metanol y agua.

Los números importan

¿Ya te has asegurado de que tu botella de alcohol de quemar no contiene otros aditivos? Entonces, para obtener el alcohol 70 % a partir del alcohol de 95 % o 99 % tienes que mezclar 100 ml de alcohol con 41 ml de agua. Si quieres hacer más, usa múltiplos de estas cantidades, como 200 ml de alcohol/82 ml de agua o 300 ml de alcohol/164 ml de agua, y así sucesivamente.

¿Por qué no son 70 ml de alcohol y 30 ml de agua? Porque, al mezclarse, el agua y el alcohol pierden algo de volumen, de manera que se ha calculado que, para obtener los 100 ml totales, hay que poner más agua. No te preocupes, no tienes que ir a por un matraz o una báscula de precisión para que sean justo 41 ml de agua, pueden ser 40 ml.

Cómo disolver el alcohol de quemar según el uso que le quieres dar

Veamos el siguiente caso: tienes alcohol de quemar del 95-99 % de pureza y lo quieres disolver para aprovecharlo. Aquí tienes los usos que puedes darle a cada disolución que te proponemos.

Una parte de alcohol y tres de agua

Limpiacristals, limpiar los azulejos, encimeras, vitrocerámica y muebles (incluso de madera), sacar brillo al acero inoxidable, como quitagrasas (dejar actuar unos minutos).

Puro (95-99 %)

Quitar restos de pegamento, quitar manchas de rotulador o tinta de superficies.

Otras mezclas con alcohol de quemar

– Para limpiar el parqué: alcohol de quemar y aceite de linaza a partes iguales.

– Para quitar la cal de la mampara de plástico del baño: mezcla un tercio de agua, un tercio de amoniaco y un tercio de alcohol de quemar.

– Para limpiar aluminio: mezcla alcohol de quemar y vinagre de vino blanco a partes iguales.

Como ves, si sabes cómo diluir el alcohol de quemar de la forma adecuada, podrás utilizarlo para un sinfín de propósitos.

de donde y como se obtiene el alcohol de quemar

¿De dónde se obtiene el alcohol de quemar?

Es importante que sepas de dónde se obtiene el alcohol de quemar si quieres utilizarlo para la limpiar tu hogar debido a sus propiedades desinfectantes y desengrasantes. Debes tener en cuenta de dónde se obtiene y cómo se obtiene, ya que es un producto que puede llegar a suponer un peligro si no se utiliza de manera adecuada. Hay que tomar una serie de precauciones para evitar riesgos innecesarios.

¿De dónde se obtiene el alcohol metílico?

El alcohol de quemar o alcohol de madera se obtiene en la industria mediante la destilación de la madera o mediante síntesis a partir del monóxido de carbono o del metano, gracias a un proceso posterior de cloración e hidrólisis.

Originariamente, esta sustancia se producía mediante destilación destructiva de astillas de madera, que es la materia prima que le da el nombre. El proceso de obtención del alcohol consistía en destilar la madera produciendo la ausencia de aire a unos 400 °C aproximadamente. De manera que también se desprendía una serie de gases combustibles (CO, C2H4, H2).

En la actualidad, todo el alcohol de quemar que se produce a nivel mundial se obtiene mediante un proceso catalítico a partir de monóxido de carbono e hidrógeno, es decir: CO + CO2 + H2 = CH3OH. Esta síntesis se lleva a cabo a altas temperaturas y presiones, siendo necesario el uso de reactores industriales de gran tamaño y complejidad. Dicha reacción tiene lugar una vez alcanzada la presión aproximada de 200-300 atm, y la temperatura aproximada de 300-400 °C.

Cómo se obtiene

Los procesos industriales que se suelen utilizar para la elaboración de dicha sustancia, empleando en ellos cualquiera de los tres tipos de alimentación, tanto gas natural como mezcla de hidrocarburos líquidos os carbón, son aquellos que han sido desarrollados por las marcas Lurgi Corp. e Imperial Chemical Industries Ltd. (ICI).

El proceso Lurgi es un proceso de baja presión para obtener metanol a partir de hidrocarburos gaseosos, carbón o líquidos. Este consta de 3 etapas bien diferenciadas; en primer lugar, el reforming, en segundo lugar, la síntesis y por último, la destilación.

El proceso ICI difiere del anterior en que la síntesis catalítica se produce en un reactor de lecho fluidizado, y en que la destilación se produce en dos etapas en lugar de en una.

Por el contrario, el alcohol etílico, aquel que utilizamos en el hogar como antiséptico para las heridas y demás usos cotidianos, se obtiene por fermentación de los azúcares o por destilación de los vinos (también es el propio de las bebidas alcohólicas, es decir, este no es tóxico para las personas).

El alcohol de quemar se utiliza normalmente en la industria como un potente disolvente orgánico de diversas esencias y resinas naturales, así como en la síntesis de productos metilados y de algunos colorantes, además de en la fabricación de todo tipo de plásticos, barnices y colas. Otros usos más comunes que se le dan a este líquido a nivel industrial son: como disolvente, anticongelante e incluso como carburante para algunos autobuses y antidetonante.

Se trata de un compuesto que presenta cierto grado de peligrosidad, por lo que debemos tener cuidado a la hora de manipularlo, sobre todo por los efectos adversos que causa en el organismo humano, ya que puede atacar de gravedad a los nervios ópticos, a la piel, a los oídos… En caso de sufrir una intoxicación aguda, la persona presentará dolores de cabeza graves, molestias en la visión, confusión, mareo… En el peor de los casos, puede llegar a producir convulsiones y causar un coma.

Por ello es importante saber de dónde se obtiene el alcohol de quemar, así como las precauciones que es necesario tomar a la hora de manejarlo.

el alcohol de quemar desinfecta

¿El alcohol de quemar desinfecta?

La respuesta es sí, pero no se utiliza con este fin porque es tóxico en contacto con la piel, por inhalación o por ingestión. Además, es más inflamable que otros alcoholes. Seguramente, te habrá extrañado esto porque también se llama alcohol. Pero debes saber que existen tres alcoholes diferentes en el mercado: metanol, etanol e isopropanol. También son llamados, respectivamente, alcohol metílico, alcohol etílico y alcohol isopropílico.

Los alcoholes y su propiedad desinfectante

Los alcoholes son los desinfectantes más antiguos de la humanidad. Todos tienen propiedades antisépticas y antimicrobianas, es decir, acaban con bacterias, virus y hongos. ¿Qué diferencia hay entonces? Te lo explicamos brevemente.

Alcohol etílico

No es tóxico para los humanos, de hecho es el alcohol que contienen las bebidas alcohólicas. Se utiliza tanto para desinfectar heridas como superficies, la piel o incluso los textiles. Para las heridas se usa en concentraciones menores del 90 %, ya que este alcohol resulta irritante y a esas concentraciones forma un coágulo que podría proteger a las bacterias supervivientes.

Alcohol isopropílico

También se utiliza en desinfectantes para manos y superficies, ya que no es tóxico para la piel. Actúa de forma parecida al alcohol etílico, aunque, al parecer, es más efectivo contra ciertos microorganismos, como la E. coli y algunos tipos de Staphylococcus aureus​.

Alcohol metílico

Este es el alcohol de quemar. Es también desinfectante, pero no se puede utilizar en la piel porque es altamente tóxico. Además, sus vapores también son tóxicos, pero nos puede servir para desinfectar algunas superficies de la misma manera que el resto de los alcoholes. Aunque, atención, no todas las superficies, porque para algunas resulta corrosivo. Además, en algunas superficies solo se puedeemplear diluido, como veremos luego, y esto hace que también se reduzca su efecto desinfectante.

Qué puedes desinfectar con alcohol de quemar y cómo hacerlo con seguridad

En primer lugar, para desinfectar con alcohol de quemar debes protegerte adecuadamente con guantes, mascarilla y gafas que cubran tus ojos.

En realidad, este alcohol se utiliza más para limpiar la suciedad incrustada y la grasa, para lo que es más efectivo que muchos otros productos. También para dar brillo. Pero si no tienes otro producto a mano para desinfectar, puedes usarlo, siempre siguiendo las recomendaciones de uso para no dañar la superficie.

Y ahora vamos a ver las superficies que puedes desinfectar con alcohol de quemar y cómo hacerlo.

Azulejos y muebles de cocina: perfecto como desengrasante y moderadamente desinfectante, porque se emplea diluido. Para ello, hay que poner un chorro de alcohol de quemar en un recipiente con agua caliente. El agua caliente aumentará su efecto desengrasante y desinfectante contra varios microorganismos que no resisten altas temperaturas.

Acero inoxidable: también en la cocina tenemos fregaderos, grifos y otros materiales de acero inoxidable que se pueden limpiar con tres partes de alcohol y una de agua, e incluso mezclas más concentradas si quieres mayor efecto. Pero nunca limpies así menaje de cocina en contacto con los alimentos, como ollas o cubiertos.

Vitrocerámica, cristales y espejos: mezcla una parte de alcohol y tres de agua, pulveriza la superficie y retira con una gamuza suave. En el cristal y los espejos resulta muy eficaz añadir un poco de amoníaco a la mezcla. De esta manera, quedarán brillantes y, a la vez, desinfectados.

Mampara de plástico del cuarto de baño: resulta muy eficaz para eliminar la cal. Mezcla alcohol, amoniaco y agua a partes iguales en un pulverizador, aplica y deja actuar unos minutos. Seca con papel absorbente y lograrás que la mampara esté como nueva y, además, desinfectada.

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Como ves, existen bastantes superficies que puedes desinfectar con alcohol de quemar, pero nunca la piel; y no debes inhalarlo.

¿Es tóxico o peligroso el alcohol de quemar?

El alcohol metílico es un líquido incoloro cuyo olor característico resulta algo dulzón, aunque no llega a ser sofocante. No obstante, sí está catalogado como producto químico tóxico.

Su grado de toxicidad depende del método con el que haya sido administrado: si lo has inhalado o tocado es perjudicial a nivel medio, mientras que si lo has ingerido resulta altamente dañino.

Efectos del alcohol metílico

Sus efectos dependen precisamente del tipo de contacto que hayas tenido con el producto. Te los presentamos por orden de menor a mayor gravedad.

1. Si se ha tocado

Si has entrado en contacto físico con el metanol, experimentarás irritación en la piel y las mucosas, las cuales se enrojecerán y secarán. Debes tener bastante cuidado si se da esta situación, puesto que la piel puede absorber el alcohol metílico hasta provocar un nivel de toxicidad alto.

2. Si se ha inhalado

Las vías aéreas y los ojos se irritan, lo que da lugar a tos, estornudos, dolores de cabeza, fatiga, vértigos y vómitos. Si la inhalación de los vapores ha sido masiva, puede derivar en dificultad respiratoria con incremento de secreciones, convulsiones e incluso edema pulmonar. Asimismo, se han dado cuadros de ceguera permanente. En términos médicos, produce además acidosis metabólica.

Este caso resulta especialmente lesivo y maligno para niños y adolescentes.

3. Si se ha ingerido

Aunque por suerte es la situación más improbable, es también la más grave. Si has ingerido el químico, lo primero que notarás es una sensación de ardor en la garganta. Posteriormente, experimentarás fuertes dolores abdominales que, según lo tomado, pueden ir acompañados de nauseas, diarreas y vómitos. Los casos más graves pueden presentar incluso episodios de inconsciencia y convulsiones.

¿Qué hacer ante casos de intoxicación?

Lo primero que debes hacer ante intoxicaciones accidentales es alejar inmediatamente al sujeto afectado del producto. A continuación:

– Si se trata de una intoxicación por contacto, retira rápidamente las ropas que hayan podido quedar impregnadas de la sustancia y lava la zona con agua.

– En caso de contacto ocular, lava con abundante agua los ojos durante diez minutos.

– Si se ha ingerido, debes acudir rápidamente al centro de salud más cercano. Solo si el afectado está consciente se le puede hacer un lavado de estómago. Una vez han pasado las horas protocolarias, los médicos le administrarán alcohol etílico como antídoto. Es probable que el paciente deba estar hospitalizado unos 3 o 4 días para controlarle la acidosis metabólica.

En definitiva, el alcohol de quemar es nocivo, por lo que debes tener especial precaución. Si lo usas en casa como limpiador, utiliza guantes y mantén la habitación ventilada para evitar accidentes innecesarios.

¿Es peligroso el alcohol de quemar?

Solo si se usa inadecuadamente.

Se evapora a los 20 ºC, rápidamente se puede alcanzar una concentración peligrosa en el aire, por lo que no es buena utilizarlo a altas temperaturas.

Pero, ¿por qué es peligroso el alcohol de quemar para nosotros?

Es altamente inflamable y tóxico por inhalación, por ingestión y en contacto con la piel. Se debe mantener el recipiente bien cerrado y conservar alejado de toda llama, fuente de calor y chispas. No se debe fumar cuando se está utilizando o se ha utilizado recientemente (ya que puede quedar alcohol evaporado en el aire) y no hay que guardarlo cerca de fuentes de calor.

Para que te hagas una idea, la Unión Europea ha categorizado el metanol del siguiente modo:

➝ Fácilmente inflamable.

➝ Tóxico por inhalación, por ingestión y en contacto con la piel.

➝ Tóxico: peligro de efectos irreversibles muy graves por inhalación, contacto con la piel e ingestión.

➝ Conservar bajo llave y mantener fuera del alcance de los niños.

➝ Mantener el recipiente bien cerrado.

➝ Conservar alejado de toda llama o fuente de chispas.

➝ No fumar.

➝ Usar indumentaria y guantes de protección adecuados.

➝ En caso de accidente o malestar, acudir inmediatamente al médico (si es posible, muéstresele la etiqueta).

➝ En caso de accidente por inhalación, alejar a la víctima de la zona contaminada y mantenerla en reposo.

➝ Líquido y vapores muy inflamables.

➝ Tóxico en caso de ingestión.

➝ Tóxico en contacto con la piel.

➝ Tóxico en caso de inhalación.

➝ Provoca daños en los órganos.

¿Cómo manejarlo de forma segura en el hogar?

A partir de estos avisos y recomendaciones de la UE, puedes deducir cómo debes manejarlo:

➝ Almacénalo siempre bien cerrado en un lugar alejado del calor y de posibles chispas.

➝ Mantenlo fuera del alcance de los niños.

➝ Utilízalo con guantes, mascarilla y gafas de protección.

➝ Nunca fumes en presencia de alcohol de quemar.

Riesgos para la salud

El metanol puede producir:

Si se ingiere: la ingestión de una dosis entre 20 ml a 150 ml es mortal. Causa dolor de cabeza, mareo, náuseas y vómitos.

Exposición ocular: puede causar ceguera o pérdida de la visión, ya que puede dañar el nervio óptico.

Exposición durante un tiempo prolongado o muy frecuente: puede causar daños en hígado o cirrosis.